Amigos Antagónicos

El Futuro

Posted in Mi transpiración... by neztha on abril 5, 2015

Acabo de llegar del futuro.

Fue un viaje algo loco, pero necesario. Y no, todavía no hay carros voladores ni política justa.

El futuro lo vi ahí, pero no como siempre me lo imaginaba en mis ansiedades. La gente por la que antes moría ya me olvidó, y la gente que me olvidó ya estaba muerta.

Nada de las cosas de las que me preocupaban en el pasado pasaron como quería, pero igual me vi muy calmado, como si todo estuviera bien.

Todos los miedos que residían en mi, parecía que se habían esfumado, desaparecido. Parecía que estar bien, era lo correcto.

Estar en paz, estaba en mi futuro, y era algo que no lograba ni siquiera planear en mi pasado.

Paz, amor y verdad. Tres cosas en las que nunca pensé, hasta antes de este viaje al futuro.

Vengo llegando del futuro; y de lo único que me pude dar cuenta, es que nos esta esperando, para sorprendernos.

Vamos juntos.

Todo es culpa de los libros…

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 20, 2014

Casi tres años sin aparecerme por acá… Literalmente, le escribo al viento.

No es mi culpa (claro que si); he leído demasiado. Es culpa desde Jodorowski, pasando por Sagmeister hasta Tim Ferris. (si también leo acerca de cosas de mi trabajo).

Igual no ha pasado mucho (claro que si): espero (en horas quizás) a mi segundo hijo; me convertí en socio de la empresa de mis sueños (aunque aveces no me deje dormir mucho); he hecho música (ruidos secuenciados dirán los entendidos); y claro, he mejorado la salud de mi colón (aunque de eso nunca les había hablado).

El asunto es que vuelvo acá por recomendación de varios amigos que no saben que son mis amigos. Nunca me ha servido esto como diario, aunque si he puesto mis opiniones personales, pero si me ha servido para tirar al aire cualquier ocurrencia, trabajo en desarrollo o demonio atravesado que ande con ganas de ficción (la cual aveces es basada en hechos i-reales).

No pretendo mucho de este nuevo encuentro (es casi como verse de nuevo con una ex-novia que uno pudo llegar a amar y no poder tener sexo porque está embarazada de otro imbécil).

Solo vine para recordarme que sigo vivo, por lo que estoy bien. Y sigo pensando que todo va a estar mejor. Siempre.

Y si, los feos seguimos siendo más, y algún día dominaremos el mundo…

XXX

Posted in Mi transpiración... by neztha on junio 22, 2011

Me despierto hoy, día que celebro mis 30 años, y me encuentro a mi hijo a mi lado en la cama con su típica pereza para levantarse (lo entiendo completamente y comparto su pereza). Cuando ya hemos dado unas 30 vueltas, peleado un rato, vuelto a dormir y luego despiertos de nuevo por los regaños de mamá, me dice: «Papá: feliz cumpleaños. Te voy a dar un abrazo con mis pies.»

Ni la discografía de Bob Dylan o una villa en Ibiza, son tan buenos como ese singular y original regalo de mi hijo: un abrazo con los pies.

No he querido pensar en mis 30 años, porque no se si agradecer por estar vivo, o analizar el porqué no estoy muerto.

Son 30 años con muchísimos fracasos, pero con enormes éxitos personales.

Son 30 años con enormes alegrías, pero con penas que me hacen aprender.

Así que son innecesarias las semblanzas o cualquier otro resumen acerca de cómo llegue hasta ser lo que soy hoy, porque en la de menos, algo pase esta noche, y sea otra circunstancia mañana.

El asunto es que llegué a los 30: tengo un hijo, hace unos días sembré un árbol, y ya casi termino mi libro.

A seguir sumando, y trabajando, porque los feos somos más, y algún día dominaremos el mundo.

Microcuento light #1310

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 31, 2011

Apenas él la vió, la desvistió con la mirada. Ella se sintió desnuda.

La deseaba.

Se deseaban.

Solo mirarse les alteraba la respiración.

A ella la mojaba escucharlo hablar.

El se soñaba sosteniendo sus nalgas.

Al saludarse esa vez, lo primero que supo él, es que ella se casaba.

Por dentro le deseó suerte.

Por fuera, los dos, todavía querían cojer.

Y empezaron a desvestirse, a despojarse de sus trapos, que venían de abrazar a alguien más.

Sus pechos estaban al aire; los de él, perfectamente moldeados del ejercicio físico; los de ella, carnosos y naturales, de una blancura pura y tentadora, con sus pezones duros de imaginar todo lo que seguía.

Se quitaron sus pantalones; ella vio el falo que la penetraría; el sintió ganas de sumergirse eternamente en su pubis.

Empezaron a frotar sus manos sobre sus cuerpos, sobre sus seres, sin dejar de mirarse, de admirarse.

Las caricias eran tan intensas, y tan bien ubicadas, que iban a llegar a su orgasmo sin tener que hacer nada más.

El frío código donde vivía su pasión, llegaba casi a derretirse en cada encuentro como estos. Sus encuentros.

Y cuando sus respiraciones estaban a punto de cortarse y abrirse hacia sus respectivos orgasmos, se perdió la conexión a internet, y se encontraron sentados, desnudos y absurdos, solos en sus sillas…

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Microcuento light #2616

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 25, 2011

Detrás de sus besos había un precipicio; de esos oscuros donde el fondo llega más rápido de lo normal y golpea… golpea con fuerza.

Pero al frente de sus besos, en medio de la textura carnosa de sus labios, había luz… mucha luz.

Había esperanza, emoción, aveces guerra, y otras veces mucha paz…

Mientras estuvo el beso, todo fue un viaje psicodélico de colores, texturas y sonidos. Placer y sabor en simbiosis perfecta.

Cuando se acabó el beso, se acabó la luz, y empecé a caer en el precipicio, del cual solo salgo, cuando la luz de sus labios, vuelven a iluminar mis caídas…

Microcuento light #2114

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 21, 2011

Todo fue culpa de tu vestido.

Luego fue culpa de los tragos de más.

Luego fue culpa de ese bar de más, de esa esquina oscura, y del atrevimiento a bailar.

Más que bailar nos repartimos caricias; tus manos me guiaban. Yo obviamente disfrutaba.

Y así amanecimos, en el cuarto equivocado, sin saber que había pasado.

La culpa es ajena, cuando la noche es buena.

Todo fue culpa de tu vestido.

Microcuento light #8512

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 19, 2011

Ya habían pasado dos horas para romper el hielo, cuando en medio del frío aire acondicionado del bar, nació la oferta: un temblor.

No cúmulos de pluralidades metafóricas bañadas en poesía barata. Un temblor. Uno que englobara todas las palabras, sensaciones, miedos y alegrías.

Al país interesado le llamó la atención la oferta; le generó la necesidad. Hasta ese día vivía bien sin temblores, sin calores dentro de su territorio, pero este temblor lo necesitaba, le llamaba.

Sus habitantes internos pedían a gritos un sacudón de madrugada.

La negociación fue dura; debía ser de la manera más natural para no quebrar ningún equilibrio orgánico, pero con una intensidad salvaje para que ninguno lo olvidara.

Hasta que llegó la madrugada elegida con anticipación…

El temblor fue tan intenso que los que dormían con su cabecera viendo al este, despertaron mirando al oeste.

El temblor fue un éxito, no dejó en ningún rincón de ningún pueblo ganas de más. No hubieron damnificados ni fallecidos, aunque si, un corazón confundido…

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Microcuento light #1423

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 18, 2011

Después de haber sido despertado por las ganas de cagar unas 14 veces, y tener posteriormente depresión «pos-descarga» (acá no aplica lo de pos-parto), decidió cambiar la rutina de sus días y salir ese día a trabajar sin bañar.

Todo resplandecía en el pueblo.

El sol calentaba, los colores vibraban, los niños sonreían y las mujeres coqueteaban.

Así, añejo y despierto desde temprano por su evacuación mañanera crónica, sintió ganas de vivir…

Y así, el día que más quería vivir, no se fijó al cruzar la calle, y murió…

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Microcuento light #6129

Posted in Mi transpiración... by neztha on May 17, 2011

No me voy a quedar antojado de tu espalda.

Menos de tu nariz.

A tu espalda la quiero para sentir sus músculos retorciéndose de placer.

Tu nariz para sentir la respiración agitada, descontrolada y falta de ritmo de minutos y horas sumadas de más placer.

Al final, si es que hay final, cubriré tu cuerpo con una sábana, como quien tapa una herida, o el Sol con un dedo, solo para verte de nuevo inalcanzable, y nazca de nuevo el deseo…

Estados inteligentes…

Posted in Mi transpiración... by neztha on febrero 22, 2011

«No me gustan las frases de personas más inteligentes que yo», es la frase más inteligente que he leído en mucho tiempo… Las «citas famosas» se han convertido en un cáncer en las redes sociales solamente comparables con Farmville y los juegos de su calaña.

Ahora, eso sí, es algo de lo que todos hemos pecado; el asunto es que todos pecamos de manera diferente. Debe de ser patético encender la compu, y aparte de abrir Facebook, abrir en otra ventana la página favorita de citas famosas, para encontrar una que resuma nuestro estado de ánimo. Ya lo dije, patético.

¿No es más fácil escribir con palabras propias cualquier arrebato mental que nos salga? Por eso prefiero Twitter; está cargado de irreverencia, ocurrencias aleatorias y de los pensamientos más retorcidos de nuestras mentes. En Facebook simple y sencillamente se termina escribiendo lo que sea más «digerible» para la masa, para mis padres, familiares, y los pocos amigos, además del 80% de extraños «amigos».

En Twitter la gente se une por sus afinidades, no porque nos hemos topado un par de veces en un bar.

¿Es posible que todo el mundo se tome de manera literal todo lo que se pone? Pues yo les confieso (#yoconfieso en Twitter), que cuando estoy medio tristón, lo último que quiero es que todo el mundo se de cuenta. Cuando estoy alegre en cambio, estoy más anuente de reírme de mi mismo y mis desgracias, por lo que comparto muchas veces la estampida de divagaciones que salen de mi cabeza en esos momentos tristones, pero que pasaron no ayer, sino hace varias semanas y ya han sido debidamente superados.

Tengo un contacto que no voy a nombrar, que siempre pone frases de canciones, y no es porque sienta lo que dice la canción en ese momento; simplemente comparte algo que le llamó la atención en un instante, y no necesariamente se siente así. Qué estúpido pensar que si uno publica una canción, es porque va «dedicada» a alguien al mejor estilo de programita de radio romántico. O porque es parte de como uno se siente. Estúpido.

Yo escucho por lo menos unas 6 horas de música al día, y muchas veces comparto cosas que voy descubriendo o recordando, y no porque quiera que todo el mundo sepa que escucho «x» o «y» cosas y declararme muy indie o muy metal o muy electro. Mucho menos porque la letra me refleje; es simple y sencillamente porque son cosas que en el momento quiero compartir, cosas nuevas, que alguien le puede significar en descubrir algo nuevo, o recordar porqué no le gustaba algo viejo.

Asociar directamente los estados o enlaces de Facebook con un estado de ánimo, es la cosa más facilista e inmadura que he visto para «evaluar» o conocer a alguien. Y digo evaluar, porque muchas veces, por lo que nos sigue la gente, es para ver en que «hueco» andamos metidos, cuántos días duró la fiesta del fin de semana, o a la par de quien me etiquetaron. El nivel de acoso a la privacidad es enorme, y salados los ignorantes, pero nunca (por lo menos en mi caso) refleja lo que realmente está pasando en ese momento.

En Facebook todo se recicla; en Twitter todo se crea (o retwittea). Tengo una «amiga» que publica mis estados de Facebook de hace meses; seguro le sirven para su momento, pero ¿porqué no crearlos? ¿Porqué no buscar en propias palabras lo que se piensa? Aunque sea transgresor o no vaya a ser del agrado de todos, es mejor decir lo que se piensa o se siente, según las libertades que se de cada individuo para compartir-se ante la masa.

Volviendo a las citas, las maneras que creo que son aceptables, es cuando uno las saca del libro que esta leyendo, de una película o escena que no se sale de la cabeza, o de una canción que empieza a ser favorita. Una cita para reflejar un estado de ánimo sigue siendo patético. Así como patético es interpretar a la ligera y de manera literal todo lo que se lee. Así como es de patético opinar acerca de todo lo que se lee. Así como es de patético hacer un berrinche por leer algo que no nos gusta.

Consejo: compartir estados atemporales; compartir algo hoy, que en quince días podamos seguir hablando de eso. Hay idas al baño, peleas con los novios, y un largo etcétera que poco nos importan.

Ahí se las dejo… (iba a terminar con una frase, pero ya no)